EL VEINTE


Es una pequeña montaña al lado del puerto de Lunada que nos posibilita una excursión corta, de no más de dos horas pero muy panorámica con unas vistas sobresalientes.
Dejamos el coche en el portillo de Lunada. Nada más aparcar el paisaje ya nos pide la primera instantánea, Peña Lusa (E) desde Lunada.

El recorrido es muy sencillo. Comienza ascendiendo unos pocos metros por las laderas del Picón del Fraile (N). En seguida encontramos un camino que recorre dichas laderas con dirección NO. A nuestra izquierda el barranco desemboca en la carretera que sube de San Roque de Rio Miera a Lunada. En este tramo, mirando al S, tenemos muy buenas vistas del Pico La Miel y el Castro Valnera. En ¾ de hora hemos llegado al collado entre El Veinte y el Picon del Fraile y en 10 minutos más estamos en la cima. Hacia el E, se nos hecha encima la mole del Picon donde sobresale la bola de las instalaciones militares. Nos volvemos hacia el N y, de izquierda a derecha, aparecen El Pizarras, Carrio, El Porracolina y más al fondo, a la derecha la Porra de Mortillano. Buenas fotos. Volvemos por donde hemos venido. En total hemos tardado 1h y 30 m.



CASTRO VALNERA DESDE EL BERNACHO.



Dolo y Esteban. Subimos al Castro un día de agosto que no apretaba mucho el sol, en contrapartida las nieblas y nubes nos acompañaron toda la mañana. Nos dejaron hacer cima sin contratiempos meteorológicos y sin despistarnos, pero no pudimos atrapar con la cámara fotográfica las mejores panorámicas que ofrece el lugar.

Llevamos el coche hasta el Bernacho (1100 m), final de una pista que se inicia en la carretera de Lunada, un poco después del Km 3. Bernacho se denomina a las cabañas que se agrupan a los pies del Castro justo debajo del Collado que separa el Castro de la Cubada Grande.

En el punto de partida había un mapa, enmarcado en postes de madera, explicando el recorrido, pero cuando fuimos estaba roto y tirado en el suelo. Iniciamos la marcha dirigiéndonos hacia “La Canal” SO. Hay una senda visible desde el principio. Nos introduce en el hayedo de la zona baja de. Estos primeros pasos los damos por la vertiente izquierda, según se baja, del arroyo que desciende por “La Canal”. Recorremos el hayedo por la senda claramente marcada con hitos y al de algunos metros el camino nos pasa a la otra vertiente del arroyo. No hay pérdida posible. Después del bosque el terreno se despeja y se cubre de matorral, la cuesta se empina un poco más, pero pronto llegamos al collado (1h) (1450 m).

Una vez en el Collado podemos contemplar la amplia vaguada que se forma entre Cubada Grande, Castro Valnera y Peña Negra. Nos pegamos a la pared del Castro Valnera, derecha según subimos, y proseguimos unos metros O por la senda que nos llevará hasta un recodo en la pared por donde continúa el camino pero muy encajonado y cambiando de dirección NE. Ya estamos encarando los tramos que nos llevarán directamente a la cima. La ascensión se hace bastante sosegada porque el camino transcurre en un amplio zig-zag sin ningún tipo de problema. Llegamos a una explanada de suelo calizo, La LLana de Las Torcas, donde la tierra ha desaparecido,  posiblemente por la erosión. La atravesamos NO siguiendo los abundantes hitos hasta que alcanzamos el promontorio cimero al que accederemos por su derecha después superar los últimos escalones en la piedra. Este momento final puede impresionar un poco a algunas personas, porque una vez superados los escalones mencionados aparecen los precipicios de la cara norte del Castro Valnera. En la cima el buzón y el hito geodésico (2h) (1718 m).

Nota1.- Puede dar lugar a equívoco el hecho de que la zona alta del monte este coronado por dos promontorios. A la izquierda, el más pequeño, que se denomina “Alto Los Dojos” y a la derecha, el más alto, “Castro Valnera” propiamente dicho.

Nota 2.- El Mapa que he usado es el de CETYMA
Nota 3.- Este recorrido se puede iniciar en la carretera de Lunada dejando el coche al inicio de la Pista. Entonces deberíamos sumar una hora más de ida y otra de vuelta.




ESPINOSA - STA OLALLA - LAS MACHORRAS – ESPINOSA


Comenzamos la marcha en Espinosa de los Monteros (750 m), en la cervecera al lado de la Torre de los Velasco. Atravesamos el nuevo puente azul sobre la presa y subimos las escalinatas que nos llevan hasta el camino de Santa Olalla (800 m), en 10 minutos llegamos a la aldea. Seguimos por el PR BU-38 (Caminos de la Sonsierra) señalizado con rayas blancas y amarillas y comenzamos a remontar la larga cuesta que de Santa Olalla sube hasta Domingo Pájaro. Más o menos, mantenemos dirección NO. Sólo en Santa Olalla cogemos N durante unos metros hasta un depósito de agua ya comenzando la mencionada cuesta. Pero lo significativo son las marcas blancas y amarillas.

Llegamos a Domingo Pájaro (1h) (1000 m). Cambiamos de dirección y ahora cogemos N. Un camino desciende a la vaguada de Domingo Pájaro. En pocos metros le sale un ramal a la derecha que recorre el praderio por este lado hasta llegar a un pintoresco pinar y al arroyo de la Toba que baja a Barcenas. Atravesamos el arroyo y continuamos hasta alcanzar el otro lado de la vaguada donde conectamos con el camino que viene desde Las Machorras. Ahora ya en claro descenso hacia Las Machorras primero avanzamos NE y poco a poco va enfilando NO. Pasamos por encima de Barcenas y al fondo nos mira el Picon Blanco. Por el valle trascurre la carretera de Espinosa a las Machorras. Nuestra pista, rodeada de pinares de pino rojo continua descendiendo. Pasamos por un mirador elevado pero que algún pino caído por el viento había medio derrumbado. Al fondo entre los pinos y casi al final del trayecto se divisan algunas cumbres conocidas El Pico La Miel, La Cubada Pequeña. Ya hemos alcanzado las primeras cabañas y pocos minutos estamos en Las Machorras (2h 30m) (780 m).

Desde Las Machorras volvemos a Espinosa por la carretera, son más de 5 km. Pero en Barcenas decidimos acabar los últimos 2 km por el Bardal, explanada de desague del rio Trueba, que nos saca de la carretera, siempre más peligrosa por el tráfico.





CURAVACAS POR LA CARA NORTE DESDE CARDAÑO DE ARRIBA



Son las ocho de la mañana, Fidel, Antonio y Esteban comenzamos una aventura que, sin dejar de ser divertida, nos supuso un considerable esfuerzo.


Dejamos el coche en el aparcamiento de Cardaño de Arriba (1400m). Justo desde ahí mismo sale la pista hacia “La poza Lomas”. La recorremos durante unos tres kilómetros NE, hasta encontrar el desvío a la derecha hacia el Ves. Está marcado con pintura blanca en una piedra, aunque cuando pasamos la pintura casi había desaparecido. Para no dar lugar a equívocos, al lado de piedra pintada hay un poste y cartel metálicos que señalizan la dirección hacia el “Lago Lomas”. Nosotros cogemos el desvío y nos acercamos al arroyo Lomas a través de una pista que en unos 500m nos lleva hasta un puente de madera por donde cruzamos el arroyo. En frente a la derecha, hay una cascada sobre una marcada grieta en la pared, es la cascada del arroyo Hormaz cuando desemboca en el Lomas.

Desde el puente de madera seguimos los pocos hitos que nos indican la ascensión hasta el alto de Hormaz a través de unas laderas empinadas y pobladas de escobas pero muy transitables NE. Alcanzamos un colladito en el cordal (2050m). Mirando hacia el este vemos el collado del Ves y el Pico de Hoya Continua. Al SO Espiguete y Pico Murcia. Continuamos con dirección E a la cara sur del Alto del Ves, circundamos el pequeño circo y en pocos minutos estamos en el collado del ves, en el cordal que une el Alto del Ves y el Pico de la Hoya Continua (2h 15m) (2070m).

Hacia el E se extiende el amplio praderio del arroyo de Ves a los pies de las caras norte del Curavacas y la Curruquilla. Descendemos del collado con dirección SE para atravesar el praderio, donde tropezamos con algunos mastines con rebaños que afortunadamente no nos atacaron. Sin perder el rumbo nos acercamos al contrafuerte norte de la Curruquilla, buscamos la forma de superarlo, hay sendas e hitos. Poco a poco avanzamos por los pedregales hasta situarnos en la hoya superior encima del lago Curavacas. Este tramo que acabamos de recorrer es bastante cansino, debemos buscar el paso entre el roquedo y con frecuencia aparecen pequeños cortados que hay sortear, también algún nevero persistente en verano.

Ya en la Hoya Superior, a los pies de la pared norte del Curavacas nos dirigimos E a las pedreras situadas a la izquierda de la pared según la miramos. Nos elevamos por las pedreras primero con dirección SE pero pronto giramos a la derecha y ascendemos O. Tenemos enfrente la Cima Este que parece accesible trepando una brecha, pero continuamos O y encontramos un camino bien señalizado con hitos que recorre la cara norte. Es un recorrido expuesto a los barrancos de cara norte pero no tiene peligro con un poco de cuidado. Casi al principio aparecen unos pasos un tanto expuestos, hay que trepar un par de metros sin dificultad, luego el camino se mete en un encajonamiento de la pared para salir a un punto que impresiona un poco. Seguimos O atravesando una terraza herbosa desde la que tenemos una panorámica magnífica del lago Curavacas. En pocos minutos estamos en un pequeño collado entre la cima E y la Cima del Medio. Sólo tenemos que cambiar de rumbo, giramos a la izquierda y SE y por un senda evidente recorremos la cresta cimera que nos dejará en el hito geodésico de la Cima Este ( 2524m) (5h 45m). Las vistas desde la cima son impresionantes. Al norte tenemos el macizo oriental y central de Picos de Europa, al noroeste Peña Prieta, al oeste el cordal de Curavacas , Curruquilla y Pico de la Hoya Continua y más al fondo Espiguete y Pico Murcia.
Volvemos por el mismo recorrido.

Nota.- En el tiempo total va incluida ½ hora que pasamos comiendo un bocadillo