PICO SAN VICENTE DESDE RAMALES.




Iniciamos la marcha en el parking de Ramales de la Victoria (84 m), al lado del polideportivo El Regato. Recorremos la avenida principal de la localidad (SE), siguiendo la carretera N 629, hasta llegar a la gasolinera. Unos metros más adelante, en el barrio del Salto del oso, un desvío a la derecha nos baja al río Gándara que lo cruzamos sobre un puente. Ahora estamos en la margen derecha del río, según la marcha. Avanzamos por pista cementada (SE), paralelos al curso del agua, pasando por varios caseríos y sus prados colindantes, hasta llegar a la altura de una piscifactoría situada en el cauce. En este punto hay que abandonar la pista y coger una senda a la izquierda que continúa bordeando la ribera. Ojo¡ es muy fácil despistarse porque el desvío tiene el poste indicador mal colocado. En vez de estar situado a la entrada de la senda, está clavado dos metros dentro y no se ve desde la pista.

Continuamos (S) por un arbolado muy tupido de avellanos y encinas. Estamos entrando en el encinar cantábrico (Quercus Ilex subsp. Ilex) que nos acompañará todo el recorrido hasta Manzaneda. El río y el encinar crean un entorno que conmueve por su belleza. Al otro lado del río, a nuestra izquierda se levantan las paredes de La Mortera.


La ruta no pierde la dirección sur y va ganando altura suavemente durante 2 km. En este punto aparece un indicador, que señala hacia el barrio de Manzaneda, cambia la dirección a oeste y nos dirige por una cuesta bastante pronunciada. Según subimos pasamos al lado de unas cuevas antes de llegar al barrio de Manzaneda (480 m). Nos hemos colocado en extremo sur oriental de la sierra de Hornijo con sus tres cimas orientales dominando el paisaje : Pico San Vicente, El Piquete y Ancillo. Si miramos al sur, a nuestros pies se abre el valle de Soba y en el horizonte se pueden divisar de derecha a izquierda las siguientes cima: Las Motas, Castro Valnera, Peña Lusa, El Picón Blanco, El Caballo, Zalama y el crestería de Ordunte.



Ya solo nos queda encarar las duras laderas del Pico San Vicente, el más cercano y prominente de los que tenemos enfrente. Nos encaminamos hacia el norte, por un terreno cada vez más inclinado, sin perder de vista los hitos y la senda. El itinerario se desvía un poco a la izquierda para volver a la derecha y ascender  los últimos metros directamente hasta la cima (913 m). La parte final de este tramo es de roca caliza y tiene mucha inclinación por lo que hay que superar pequeñas trepadas sin dificultad, pero incómodas. En cualquier caso, cabe resaltar que es conveniente seguir la senda, porque es la vía más fácil para superar el roquedo.



Desde la cima la vertiente norte se precipita sobre Ramales. A fondo se pueden ver Santoña y Santander. A nuestra izquierda se extiende la sierra de Hornijo y a la derecha tenemos el pico La Mortera. 



DATOS
DISTANCIA:13,1KM
DENIVEL: 896M


TXAMANTXOIA DESDE BELAGUA




La ruta no tiene ninguna pérdida. A unos 10 km de Isaba, por la NA 1370, encontramos la borda Marengo (920m) que destaca por el cartel anunciando la venta de quesos. Aparcamos en el pequeño espacio que se abre a la entrada, al lado de la carretera. Quizás el único obstáculo que hay que superar lo tenemos al principio. Al lado de la borda pasa el río Belagua con suficiente caudal como para hacer incómoda su travesía. Lo superamos saltando entre piedras a la ida. A partir de aquí, sólo hay que seguir la dirección Sureste hasta la cima.

 

Justo enfrente de la borda, al otro lado del río, sale una senda que se eleva, con fuerte pendiente, entre los pinos siguiendo el curso de una riega. Llegamos a una pista que atravesamos y continuamos por la senda manteniendo la dirección. El pinar se convierte en hayedo y se suaviza la cuesta hasta que se salimos a un claro. En este punto nos liamos un poco. En vez de seguir las indicaciones y los hitos hicimos caso de un track de GPS que nos metió en el hayedo joven haciendo la ascensión algo más incómoda.


Enseguida desaparece el bosque y el paisaje se abre a los Pakos de Taburin. Una zona de pastos que encontramos completamente nevada. El relieve se aloma y, aunque todavía queda desnivel, llegamos a la cima (1940m) sin ningún problema y disfrutando del paisaje.



Desde la cima destacaban las vistas del valle de Linza y las montañas que le rodean, nevadas a media ladera y medio cubiertas por las nubes ( Chinebral, Atxerito, Petretxema, Mesa de los tres reyes etc). A nuestra espalda (O) se pueden contemplar los bloques de Kartxela y Lakora que brillaron más espectaculares con la luz de la tarde, cuando el cielo se despejó.


Volvimos por el mismo camino, con la salvedad que en esta ocasión, para superar el río Belagua, nos metimos por donde el caudal era menos profundo.




DATOS
DISTANCIA: 12,36KM