AIZKORRI DESDE EL PUERTO DE OTZAURTE (ZEGAMA).

 


EUSKERA

Desde Zegama subimos al alto de Otzaurte, en la carretera que se dirige a Altsatsu. Justo en el alto hay una Venta y enfrente de ella se encuentra un aparcamiento donde se puede comenzar la ruta por una pista cementada que sale desde allí mismo. Nosotros optamos por continuar con el coche por la pista cementada y al de 4 km, más o menos, alcanzar otro parking cercano al túnel y la ermita de San Adrián.


Desde el aparcamiento (840 m) seguimos las indicaciones que se dirigen a San Adrián (NO). Entramos en el bosque y enseguida pasamos al lado de la casa de Miqueletes. En ese momento nos orientamos hacia el Oeste conectando con la GR12 y con el camino medieval que unía Gipuzkoa con la llanada alavesa. En breve el camino se orienta hacia el Suroeste y llega a la ermita y al túnel de San Adrián (1040 m). Continuamos por el camino medieval, recorriendo el hayedo, hasta llegar a un cruce donde se juntan varias G.R. a los pies del monte Linategieta. Tanto la GR 12 como la GR121.4 se encaminan hacia el Noroeste, hacia las campas de Urbia, pero nuestro objetivo estaba hacia el Norte.



Según se llega al cruce, a la izquierda, un hito grande marca la senda que sube en pocos metros a Linategieta (1180 m). Lo subimos. Para continuar descendimos de nuevo al cruce y tomamos dirección Norte como indica un enorme rótulo, con el nombre AIZKORRI en rojo, sobre el tronco de un árbol. 



La senda avanza por el bosque hasta que salimos al roquedo despejándose la panorámica sobre las campas de Urbia. Seguimos ascendiendo por la roca caliza sin perder las marcas ni la senda hasta que coronamos la cima de Aizkorri ( 1523 m) con la ermita de Santo Cristo y el refugio.



Volvimos bajando hacia el Sureste, atravesando las caras Este de Tontorraundi y Aitz Tontor Altuna. En el descenso la ruta está marcada con puntos amarillos. Al principio resulta un poco vertiginosa porque mira al barranco, incluso en algún punto se ha colocado una sirga y un refuerzo metálico en el suelo para evitar resbalones. Luego se desciende por el bosque para salir a la campas de la ermita Sancti Spíritu y a la casa de Miqueletes que vimos al iniciar la marcha. En breve estábamos de vuelta en el aparcamiento.







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