LA MUELA DE DULLA DESDE QUINTANILLA DE VALDEBODRES.

 


EUSKERA

La noche anterior al día de la ruta, cayo un helada muy severa que dejó la floresta completamente helada, vestida de blanco, creando un paisaje invernal impactante.

La ruta comienza en la plaza de Quintanilla de Valdebodres y se dirige hacia noroeste entre casas. Se pasa al lado de la iglesia dedicada a San Miguel Arcángel y un poco más adelante al lado de la dedicada a la Virgen de la Misericordia. Esta última está jalonada con varias cruces, pero nuestro camino no pasa delante de ella, sino que la dejamos a nuestra derecha y continuamos hacia el noroeste por una senda marcada con rayas rojas y blancas de la GR1, las flechas del camino de Santiago y las marcas blancas y amarillas de la PR BU 33.

En breve la ruta alcanza el arroyo de la Mata y comienza un largo tramo en el que fuimos sorteando las aguas de los arroyos, saltando de un lado para otro. Pasamos al lado de una antigua carbonera señalizada con cartel explicativo. Así llegamos a un punto donde se juntan dos arroyos, el que baja por el barranco de la Mata, a la derecha, y el arroyo que baja de los canales de Dulla a la izquierda. Seguimos el curso del de la izquierda, según la marcha (NO), y entramos en la canal de Valdecastro. Hay que decir que por el barranco de la derecha continúa la GR1, el camino de Santiago y la PR BU 33, se dirigen a Villamartin de Sotoscueva. Continuamos avanzando hasta llegar debajo de un gran promontorio rocoso llamado La Llosa. Todo este recorrido resulta más divertido que difícil, pero en algún momento tuvimos que usar las manos para bajar alguna repisa.

El promontorio de La Llosa es una gran proa de barco que divide los barrancos. Nosotros continuamos por un sendero que se eleva por el lado derecho de la Llosa y asciende pegado a la pared. En la parte alta pudimos admirar una cascada con bastante agua y que salva una caída importante.

Una vez salimos de la canal solo nos quedaba remontar los brezales, sin salirnos de la senda. Pasamos al lado de un bebedero para animales y en pocos metros estábamos en la cima de La Muela de Dulla (1143 m). Las vistas hacia el norte nos muestran La Maza de Bezana y montes de Samo y Guzmantara y hacia el sur las espectaculares canales de Dulla, grandes surcos excavados por el agua en el relieve cárstico.

Iniciamos el descenso hacia el oeste, siguiendo la línea del precipicio hasta bajar al collado conocido como La Puerta de Quintanilla (1060 m), donde conectamos con la PR BU-33 “Senda de los Canales de Dulla”. Cogimos la pista que baja hacia el este, atraviesa un precioso encinar y termina en Quintanilla de Valdebodres. Esta parte final está jalonada con los indicadores de la P.R. BU-33.

Cuando llegamos, dimos una vuelta por el pueblo y visitamos el Pozo del Infierno en la parte alta, una surgencia que alimenta un molino de agua.

En el recorrido abundaban los enebros o esquenos (Juniperus oxycedrus), el enebro común (Juniperus communis) y la encina (Quercus Ilex). Creo haber visto, también acebos (Ilex aquifolium).



DATOS

DISTANCIA: 12 KM

DESNIVEL POSITIVO: 500 M

TRACK PARA GPS

FOTOS DE LA MARCHA


VUELTA A LAS MOTAS DESDE LUNADA (LUNADA, VEINTE, PIZARRAS, GANDARILLA, EL VALLE, CABAÑA CON POZO, HONDOJON, COLLADO BECERRIL, LUNADA)

 



Es una ruta circular que comienza en Lunada, sube al Veinte y al Pizarras, baja al Valle y remonta las estribaciones noreste de las Motas, siguiendo las sendas del Valle y la de Hondojón. Por último, sube por el hayedo a los pies del pico Becerril, cerca de peña Lusa, para volver al valle de Lunada y al portillo del mismo nombre. Hace unos años hice un itinerario similar, solo que que acabamos en la carretera de los militares en Las Motas. Esta vez hemos dado una vuelta más amplia, con un resultado muy interesante.

La ruta comienza en el portillo de Lunada (1320 m). Recorre la ladera oeste de las Motas (el pico de la bola gigante) y se dirige al norte para recorrer la Sierra de La Vaga. Primero hacia el pico El Veinte (1507 m). Tuvimos que usar crampones porque es una zona umbría y la nieve estaba helada. En este tramo y desde la cima, se pueden contemplar magníficas vistas: al oeste, y enfrente nuestro, el pico La Miel, El Castro Valnera y el Torcaverosa; al noroeste, con un día despejado, los montes de Alto Campoo y Picos de Europa; al sur, y encima de nosotros, Las Motas con la bola y al este el Pizarras, Carrio, el Porracolina, La Porra de la Colina y La Porra de Mortillano.

Después, descendimos por la larga campa nevada (N) que acaba en la Colladía (1364 m) que separa al Veinte del Pizarras. Sin perder la dirección subimos al pico Pizarras (1478 m). Desde el buzón avanzamos unos metros más al norte para ver la costa cántabra, destacando la bahía de Santander.

Retrocedimos unos metros e iniciamos el descenso al fondo del valle, conocido como La Gandarilla (NE). Las laderas estaban nevadas y con nieve dura, así que avanzamos por el trazado que nos pareció más conveniente. He comprobado en otros tracks, que la mayoría de los montañeros que hacen este recorrido bajan algo por encima de nuestro trazado. De hecho, esas rutas pasan al lado de unas cabañas debajo de las paredes sur de Carrio y nosotros las dejamos a nuestra izquierda.

Una vez en la Gandarilla (1074 m) la nieve desapareció, avanzamos unos metros (SE) sobre el fondo del valle hasta llegar a un humedal donde dimos un giro a la derecha para comenzar a ascender con dirección sur . Todo este tramo lo caminamos siguiendo sendas, más o menos claras, pero no hay ninguna indicación. Si acertamos con el camino, fue gracias al GPS. Llegamos a otra zona llana conocida como El Valle y aquí, según nos acercábamos a las paredes de las Motas, aparecieron los postes con rayas blancas y amarillas de la La Senda del Valle. Entonces la ruta da otro cambio de orientación hacia el este y comienza a subir, recorriendo un espléndido hayedo, donde se encuentra con la senda de Hondojón (P.R. 66), justo cuando el camino se coloca por encima de las cabañas de Brenaluenga. Ahora el camino dibuja un gran zigzag (E-S-E) para llegar a una cabaña al lado de un pozo (1299 m), debajo de los Campanarios. La cabaña está situada en el collado, que se forma entre los Campanarios y las estribaciones orientales de Las Motas. En el tramo de subida por el hayedo, mirando hacia el norte, se contempla una panorámica magnífica de Peña Carrio, La Porra de la Colina, y el Mesón de Saco. Desde la cabaña, mirando hacia el sur se levantan Peña Lusa y Los Porrones ( Bustarejo y Becerril) y algo más al este el Picón Blanco.

Continuamos por la Senda de Hondojón (E), siguiendo la senda señalizada con las rayas blancas y amarillas de P. R., por un terreno cárstico. La senda cambia de dirección a sur y desciende una pared con bastante desnivel y muy empedrada, para llegar al fondo del valle conocido como Hondojón (1080 m). A partir de aquí, la Senda de Hondojón se dirige al noreste para llegar a los Altos de Asón, pero nosotros nos encaminamos hacia el suroeste, entrando en un extremo del valle. En los mapas, a esta parte del valle se la denomina, específicamente, Hondojón y está formada por las paredes de los Cubios de Peña Rubia al norte y Peña Becerril al sur.

Una vez en el fondo del valle, seguimos una senda que se mete en el hayedo que cubre las laderas norte del pico Becerril, a nuestra izquierda (S). (No hay indicaciones claras, así que recomiendo seguir un track de GPS para no perderse). Encontramos unos hitos que entran en el bosque y marcan un itinerario hacia el suroeste por unas pendientes muy pronunciadas, pero practicables. Se pueden subir sin dificultad, con paciencia y sin ahogarse. Sin embargo, perdimos los hitos y fuimos trazando nuestro propio itinerario, buscando la ruta más asequible. Así, enlazamos con una pista que sube desde debajo de Peña Lusa hasta el collado (1320 m) debajo de Becerril. Todo este tramo, desde Hondojón, es el menos marcado de toda la ruta. Nuestro itinerario, aunque tiene alguna parte pindia, no es difícil de andar.

Desde el collado, a los pies de Becerril, comenzamos el descenso al valle de Lunada, siguiendo la pista (primero S y luego O) que desemboca en la carretera Bu-572. Los últimos metros los anduvimos por la carretera hasta el puerto de Lunada.






DATOS
DISTANCIA: 18 KM
DESNIVEL POSITIVO: 1011 M




VIDEO


VIDEO RELIVE

TXINDOKI O LARRUNARRI DESDE LARRAITZ. RUTA CIRCULAR. VUELTA POR LA CASCADA DE MUITZE

 


EUSKERA

Aparcamos en el parking de Larraitz, al lado de la ermita. Iniciamos la marcha con dirección sur, atravesando el parking del otro lado de la carretera hasta una valla metálica donde aparecen las rayas blancas, rojas y amarillas de GR y PR. Al otro lado de la valla, la pista sube cambiando de orientación hacia el oeste, por la zona de Neskarri. A algo más de 200 metros de la valla, a la izquierda de la pista, sale una senda escalonada donde también aparecen las rayas rojas, amarillas y blancas.

La senda mantiene la dirección oeste mientras gana altura a través de los prados que cubren las laderas de la cara norte. Así, alcanzamos un collado (660 m) debajo de la arista, teniendo justo encima el promontorio rocoso de Amezti. A partir de aquí, avanzamos hacia el sur por un camino muy enfangado. Pasamos al lado de la fuente Oria y atravesamos el arroyo Urdanzulo, donde cambiamos de dirección a oeste para alcanzar la cota de 920 m. Aquí, volvemos a cambiar de dirección hacia sureste para pasar al lado de las bordas de Zirigarate Goikoa (1100 m) y algo más adelante, para llegar al collado (1147 m) a los pies de Txindoki.

Desde el collado solo nos queda elevarnos por las laderas sur de Txindoki, siguiendo la senda hasta la cima. Txindoki o Larrunarri (1342 m). Desde la cima, hacia el sur , se extienden las praderas de Aralar. Podemos nombrar algunas de las cimas más cercanas, Auntzizegi, Belingaratz, Zumalerdi. Mirando hacia el norte se abre el valle de Amezketa y Tolosa.

Descendemos de nuevo al collado, pero continuamos hacia sureste por una larga pendiente de hierva. Pasamos al lado de una borda junto a unas hayas, Egurral (1120 m) y seguimos hasta el fondo del barranco que forma el arroyo Muitze. La ruta continúa descendiendo paralela al arroyo (NE), que baja formando pequeñas cascadas hasta llegar a una bifurcación. Hasta ahora, hemos descendido siguiendo rayas blancas y amarillas, pero en la bifurcación las rayas continuan por la derecha (NE) hacia Ergoiena. Nuestra ruta coge la senda de izquierda, que baja a la cascada de Muitze, atraviesa el arroyo, continua por la otra ladera, hacia el noroeste, y pasa al lado de una cruz que recuerda a un montañero muerto. Estamos bordeando el bloque de Txindoki. La senda esta bien, pero en algunos tramos desciende con fuerza, siendo fácil resbalarse si hay barro.

Al de un rato se suaviza la pendiente y entramos en el bosque. A su salida llegamos a una pista al lado de un repetidor. Avanzamos un kilómetro, más o menos y encontramos un desvío por donde pasamos a la subida. Ya solo queda retomar el camino de subida para llegar de nuevo al parking.




DATOS

DISTANCIA: 12 KM

DESNIVEL POSITIVO: 950 M


TRACK PARA GPS

FOTOS DE LA MARCHA


ERNIO Y AIZPEL DESDE ALKIZA

 


EUSKERA

 Dejamos el coche en el parking de Alkiza (310 m). Salimos con dirección oeste, siguiendo las marcas blancas y amarillas, hasta llegar a una bifurcación. En el cruce los postes indicadores nos señalan hacia el oeste “Askantzo”, izquierda, y hacia el norte Ernio PR Gi 78, derecha. Cogemos dirección a Ernio y, en breve, llegamos al barrio de Areta, donde encontramos otra bifurcación (360 m). Esta vez nos dirigimos a la izquierda (O), siguiendo las indicaciones.

Avanzamos por la pista hasta una tercera bifurcación (470 m). Un nuevo poste indicador señala a la izquierda Ernio por la borda de Lete y a la derecha Ernio por la Santa Cruz. Cogemos la pista de la derecha que dibuja un zigzag y nos encamina hacia el noroeste, mientras atraviesa un frondoso bosque, hasta llegar a un nuevo cruce en Itxurain (680 m). Ahora el camino coge dirección norte y alcanza el collado de Irumugarrieta (760 m). El collado se encuentra entre Ernio y Ernio Txiki. Mirando hacia el oeste se levanta el bloque de Ernio y en la zona cimera se puede distinguir una gran cruz.

Nuestra ruta hace algo inesperado. Primero sube directamente (O) hacia la gran cruz, pero en la cota de 870 metros encuentra una senda clara que se encamina hacia sur, recorriendo toda la pared norte del cordal Aizpel-Ernio hasta el collado de Aizpel (940 m). Una vez en este collado tomamos dirección norte para recorrer el cordal rocoso hasta alcanzar la cima de Aizpel (1067 m) primero y luego la de Ernio (1074 m). La cima está coronada por un sin fin de cruces y a sus pies hay un refugio con la leyenda “Erniozaleak”.

Desde la cima mirando al norte se contempla la costa de Gipuzkoa y destacan Zarauz, Donostia con Jaizkibel y Peñas de Aya.

Para volver bajamos de nuevo al refugio y continuamos con dirección norte, bordeando las laderas de Portumatza, un promontorio al norte del Ernio. A nuestros pies sobresale la iglesia de Errezil. Llegamos a las campas de Zelatun, a una especie de venta o bar, dos edificios, que en los mapas que he consultado se denomina Ernio. Desde la venta, con dirección sureste, salen dos pistas, cogemos la de la derecha que acaba en el collado de Irumugarrieta.

Desde aquí, volvemos por el mismo camino de subida hasta el cruce de Itxurain, donde cogemos el ramal de la derecha, según bajamos, (subimos por el de la izquierda). La pista hace una curva muy cerrada al lado de una borda y avanza paralela al arroyo Korosti. Más adelante alcanza uno de los cruces por los que hemos pasado a la mañana y llega al barrio de Areta primero y luego a Alkiza.




DATOS

DISTANCIA:16 KM.

DESNIVEL POSITIVO: 881 M.


TRACKPARA GPS

FOTOS DE LA MARCHA


UNTZILAITZ DESDE MAÑARIA. VUELTA POR ATXARTE

 


Aparcamos en el parking de Mañaria (200 m). Retrocedimos (E) unos metros por la carretera general (BI 623) hasta llegar a un cruce, al otro lado de la carretera, donde un poste indicador y las marcas blancas y amarillas marcan el camino de Aldegoina .

Avanzamos (S) por la pista asfaltada que sube con fuerza, dando varias curvas cerradas. Al llegar a un caserío continuamos por la pista de su izquierda (SE). Ganamos altura con rapidez y en breve entramos en el bosque donde encontramos un desvío, a la derecha de la pista, y otro poste indicador (260 m) que nos dirige hacia Aldegoiena. Unos metros más arriba, en otra bifurcación, cogemos la pista de la derecha también, marcas blancas y amarillas. Y más arriba (320 m), en una tercera bifurcación, aparece otro poste señalando la dirección de Aldegoiena, pero con letra pequeña indica Untzilaitz a la izquierda (E). En la cota de 380 m, aparece una cuarta bifurcación junto a un poste metálico. Continuamos por la izquierda siguiendo una pista que dibuja un zigzag hasta entrar en un sendero que sube directo (E) hasta el collado de Oraeta (560 m). Desde el collado, mirando hacia el norte, podemos contemplar Mugarra y la cantera, Errialtabaso y Mañaria.

Desde el collado seguimos (S) por una senda, que se difumina, hasta alcanzar la cima Untzilitz (940 m). Las vistas recogen todo el entorno, pero destacan hacia el sur el cordal de Anboto y al fondo Udalaitz.


Descendemos por la arista (NO) para encontrar la diagonal de Untzilaitz (no confundir con la Gran Diagonal), una senda que recorre, con dirección sur, la cara oeste del monte, pero tiene algo de exposición al vacío. Una vez superada, aparecen unas placas calizas cercanas al precipicio, que en condiciones normales se pasan sin problemas, pero nosotros las encontramos mojadas, con riesgo de resbalarnos.

Continuamos bajando hasta colocarnos en las paredes de escalada (600 m) de Saukuko Gane. Aquí conectamos con una pista que se dirige hacia el oeste hasta llegar a un cruce donde cambiamos de dirección hacia el Este para buscar la bajada a Atxarte. La senda que baja a Atxarte (SE) pasa por debajo de las paredes de Urrestei, no es muy evidente y con el suelo embarrado el riego de resbalarse es grande. No hay peligro de una caída grave, pero a haber tanta roca nos podemos llevar un buen golpe.

 Una vez llegamos a la ermita del Santo cristo de Atxarte (300 m) nos encaminamos hacia los edificios de la cantera, donde encontramos postes indicadores con marcas rojas y blancas de la GR229. Cogemos la dirección hacia Mañaria y Mendiola. El camino se dirige hacia noreste y sigue la margen izquierda del arroyo Atsarte. Al de unos 200 metros de las señales aparece una bifurcación a la derecha que no cogemos. Seguimos adelante hasta el barrio de Mendiola y al de 3 kilómetros con dirección norte se llega a Mañaria.





DATOS

DISTANCIA: 10,66 KM

DESNIVEL POSITIVO: 824 M

TRACK PARA GPS

FOTOS DE LA MARCHA


CASTRO VALNERA DESDE PANDILLO (POR LA CANAL DE LA VARA)

 


EUSKERA

El Castro Valnera también se conoce como "El ogro pasiego", sin embargo, su ascensión suele ser amable hasta que se intenta por "la Canal de la Vara" desde Pandillo. Además del fuerte desnivel (más de 1200 m) y la pronunciadísima inclinación de la canal ( más de 50%), la hierba alta , cargada de rocío, y el piso muy irregular hacen que la ruta sea bastante tortuosa hasta alcanzar el collado de la Pirulera. Sobre todo, quiero resaltar que no es una ruta de senderismo. En mi opinión, es comparable a la alta montaña. Su dureza la hace especial.


Partimos de la Estribera (520 m), en el barrio de Pandillo, en Vega De Pas. Pasamos el puente sobre el arroyo Pandillo y nos dirigimos a la izquierda, según la marcha, para seguir una senda que con dirección Este remonta el curso del arroyo Lelsa o Aguasal. Más adelante pasamos a la otra orilla del río por el puente de La sel de Garma, de seguido aparecieron las cabañas de Garma y una indicación de la vía ferrata de Pandillo. Continuamos avanzando y la senda comienza a ganar altura con más rapidez hasta alcanzar la cascada del Aguasal o Churrón de Agualto (820 m).


En este punto se acaba la senda. Es una especie de mirador hacia la cascada, pero no permite continuar. Tuvimos que retroceder unos metros para superar un tramo muy inclinado por la izquierda, siguiendo una traza poco clara entre la hierba alta, que nos  colocó encima del farallón que da lugar a la cascada. Avanzamos con cuidado de no resbalar, como consecuencia de hierba mojada, porque el riesgo de caerse por la ladera abajo es grande. Así, conseguimos entrar en el arroyo Lelsa (900 m). Por el arroyo, el avance es más cómodo que por las laderas herbosas.  Continuamos subiendo, llegamos a un punto donde convergen dos rieras. Cogimos la de la derecha, según la marcha, pero más arriba, volvió a aparecer un cruce de rieras. En esta ocasión continuamos por la izquierda desembocando en las rampas herbosas que nos condujeron hasta el collado de La Pirulera (1520 m).

Desde el collado se remonta la arista nororiental del Castro Valnera para llegar a su cima (1717 m).

Para descender nos dirigimos al suroeste, pasando por debajo del Alto Los Dojos, promontorio vecino al de la cima del Castro Valnera. Siguiendo una senda y algunas trazas de senda, entramos en la arista suroccidental del Alto Los Dojos. Es un descenso muy inclinado donde hay que destrepar algunos resaltes, sin dificultad. La arista, a partir de su mitad, desciende hacia el oeste y finaliza en el cerro de Colina. Llegamos a las cabañas de Colina (1150 m) y más abajo a las de Helgueron (880 m), colocándonos justo encima de Pandillo. Ahora, la senda se encamina hacia el sur para conectar con el camino de las cabañas de Ruyema. Una vez en el camino, solo nos queda tomar dirección oeste y bajar en pocos minutos a La Estribera.

Es muy probable que repita la ruta, porque las nieblas no nos dejaron disfrutar del esplendor verde de estos valles. En cualquier caso, espero que la colección de fotos que he colgado en el álbum sean representativas del recorrido.





DATOS
DISTANCIA: 12,6 KM
DESNIVEL POSITIVO: 1240 M.