RUTA CIRCULAR POR EL BARRANCO DE LA PILLERA DESDE NOCITO




Iniciamos esta marcha en el mismo punto en el que iniciamos la ruta al Tozal de Guara desde Nocito ( enlace). Desde el puente de Nocito recorrimos hacia el sur unos 2 km por pista, paralelos al arroyo Guatizalema. Cuando llegamos a la bifurcación cruzamos a la izquierda el arroyo y seguimos la indicación del poste indicador para entrar en el barranco de la Pillera (SE). Atravesamos en varias ocasiones el arroyo de La Pillera, encontramos una canalización y avanzamos por la pista que evoluciona de un lado al otro del rio según el terreno le permite.

La ruta sigue con rumbo (E), llegamos al poste indicador que marca la ruta al Tozal a la derecha y la del barranco de la Pillera hacia adelante. Más adelante encontramos la badina del Estañonero, un rincón francamente atractivo. Continuamos hasta el poste indicador que marca el fin de la ruta y un lugar conocido como el Brazo de mar y llegamos a la Fuen del Guaril, donde nacen las aguas del barranco de la Pillera. Nuestra intención era hacer un recorrido circular así que seguimos por el cauce seco, hasta un cruce de barrancos. Los hitos nos condujeron con dirección norte, a la izquierda, por el barranco de las Cañatas. La senda sube por la derecha del barranco hasta un collado bajo el Tozal de las Cañatas y luego inicia un suave descenso con dirección oeste hasta Nocito. El recorrido tiene unos 11 km y 300 metros de desnivel.

Antes de entrar en Nocito se puede visitar el Santuario románico de San Urbez



TOZAL DE GUARA DESDE NOCITO.



Una ruta circular muy agradable y completa. Anduvimos 22km y salvamos un desnivel de 1400 m. mientras recorríamos el valle de Nocito y subíamos al Tozal de Guara cumbre principal de la Sierra de Guara.

Para llegar a Nocito hay que coger la N-330 en Sabiñanigo con dirección Huesca y a unos 14-15 km tomamos la desviación a la izquierda dirección Boltaña A-1604, después solo hay que seguir las indicaciones hasta Nocito. Otra opción consiste en recorrer los 35 km que separan Sabiñanigo de Arguis también por la N-330 con dirección Huesca. En Arguis tomamos una carretera de montaña que va directamente a Nocito. En los meses fríos puede haber hielo y nieve en algunos puntos de las dos carreteras de montaña.



El recorrido no tiene pérdida porque está muy marcado con postes indicadores, hitos y ,sobre todo, con una senda desde el principio al fin. Desde el puente de Nocito recorrimos unos 2 kilometros por una pista (S) paralelos al arroyo Gautizalema. Al llegar a un poste indicador dimos un quiebro a la izquierda y pasamos sobre el arroyo para entrar (E) en el barranco y arroyo de la Pillera. Avanzamos pegados al cauce que tuvimos que atravesar en varias ocasiones, con cuidado porque las rocas estaban heladas. Pasamos por una especie de canalizaciones y disfrutamos de los rincones que forma el arroyo en este tramo. Después de unos 2,5 km alcanzamos un nuevo poste indicador que señala la dirección del Tozal de Guara o la del Barranco de la Pillera. Nos dirigimos al Tozal por lo que iniciamos la ascensión por el bosque de pinos del barranco de la Espátula (SE). Sobre la cota de 1200 m la senda tuerce a la derecha (SO) y continua, sobre todo ascendiendo, pero con alguna bajadita, hasta el collado de Petrañales. Por el camino  fotografiamos y contemplamos unas panorámicas magníficas de la cadena pirenaica oscense desde Bisaurin a Vignemale, !Impresionante!. Una vez en el collado, a la derecha tenemos La punta de Corcurezo pero nuestro camino, como el poste indicador nos marca, sigue a la izquierda para meternos en un bosque de pinos (SE) y llevarnos hasta El Raso de los Hongos después de pasar por la fuente del Chinebro. Continuamos (SE) hasta que rebasamos la arista suroeste del Tozal donde cambiamos de dirección a NE para remontar la fuerte pendiente hasta la cima. Para subir esta última cuesta un poste indicador nos dió dos opciones o por la pedriza, más a la derecha, o por el abadejo, siguiendo la cresta. Creo que son más o menos iguales. Nosotros cogimos el camino del abadejo y con bastante esfuerzo subimos los 400 metros de desnivel que nos quedaban. Desde la cima, al norte el pirineo nevado en su plenitud, Bisaurin, Axpe, Collarada, Pala de IP, Peña Escarra, Partacua, Palas, Arriel, Balaitus, Arlas, Garmonegro, Infiernos, Cilindro, Perdido, Añisclo, Vignemale y los que se me olvidan, al sur el embalse de Calcón y al este la sierra de Guara.



Iniciamos el descenso (ENE) hasta llegar al collado siguiente donde unos hitos nos marcan el noreste y el camino. Mantenemos la dirección y entramos en el bosque de abetos y pinos. Al de un rato la senda da un quiebro muy marcado hacia el oeste para desembocar en una pista al lado del refugio forestal de Fenales. Continuamos por la pista unos metros, torcemos a la derecha y rápidamente de nuevo a la izquierda donde cogemos una senda que nos llevó hasta Nocito (ONO). En este último tramo la dirección a Nocito está muy bien señalizada con postes indicadores.

Todo el recorrido ¡una gozada!.



EL CAÑON DEL MASCUN

                                  


La sierra de Guara, al sur de la barrera pirinaica, es un macizo calcáreo surcado por el curso de ríos como el Bero o el Mascún que han tallado profundos cañones creando un paisaje rocoso muy característico y llamativo. Son el escenario habitual de muchas actividades deportivas, pero cabe destacar el descenso de cañones. Nosotros nos dirigimos al cañón del Mascún con otra idea, andar una ruta de senderismo que nos permitiera disfrutar de un paisaje tan excepcional. Antes que nada hay que decir que está ruta es practicable sólo en las épocas del año que el cauce lleva muy poca agua. Antes de iniciar la marcha es conveniente enterarse como se encuentra el nivel del cauce.


El itinerario no tiene perdida. Desde el pueblo de Rodellar bajamos con dirección norte al barranco del Mascún. El camino está muy señalizado con poste indicadores, también en Rodellar mismo un cartel nos explica la ruta. Desde el primer momento destacan las curiosas formas que han adquirido las rocas y los barrancos como consecuencia de la erosión del río. Avanzamos metidos en el cauce, con poca agua (N). Pasamos al lado de ermita del Castillo y de la fuente del Mascún. Continuamos (NO) sin dejar el cauce y al de unos 3 km llegamos a un punto donde una bifurcación divide el camino en dos, a la izquierda se dirige a Otin y a la derecha continua por el cauce, nuestro camino. Justo en este lugar hay unas formaciones rocosas conocidas como la Ciudadela y la Cuca de Vellostas. Las paredes del cañón con sus cavidades o sus elevaciones en forma de puros gigantes nos entretuvieron al fotografiarlas. No menos curioso nos resultó una bola de piedra gigante caída en medio del cauce "El Bolo dó Real".


A partir de este punto la senda en menos evidente y tenemos que andar con más cuidado. El río se encañona varias veces lo que nos obliga a seguir un itinerario paralelo por las orillas, a veces trepando por las laderas muy pendientes y otras veces sorteando las rocas que hay en el cauce, pero siguiendo siempre la senda o los hitos. Así hasta alcanzar una curiosa formación conocida como "El Beso". El agua ha tallado en la roca una puerta ovalada que en su parte alta parece que las rocas se besan. Aquí el cauce es más profundo y no nos queda más remedio que salir por la derecha, según la marcha, y por un terreno bastante escarpado pasar al otro lado del beso. Al de pocos metros encontramos un poste indicador que nos señala la dirección a Otin por Turmo. Remontamos una marcada pendiente, la senda del Turmo, que dibuja un zig-zag con dirección Oeste, para salvar un desnivel de más de 250 m. Llegamos a un collado y a nuestra derecha ya veíamos el pueblo de Otin, en frente y al fondo El Tozal de Guara.


Desde el collado por pista (NO) entramos en Otin, un pueblo abandonado con varias casas y la iglesia en ruinas. Seguimos las señales y los postes indicadores (O) para atravesar la aldea. Luego con dirección Sur iniciamos la vuelta descendiendo de nuevo al Mascún para llegar justo al cruce que dejamos a la mañana cuando pasamos al lado de la Ciudadela y Cuca de Vellostas. El último tramo hasta Rodellar lo hicimos sobre nuestros pasos de la mañana.


 

EL CURRO. EN LAS MACHORRAS DE ESPINOSA DE LOS MONTEROS.





Un ruta típica de senderismo. Se recorren entre 15 y 16 km por pista y se sube un desnivel de 550 m para ascender al Curro, un promontorio con unas vista magnificas sobre el circo que lleva el mismo nombre y las cumbres que lo rodean, Cubada Grande, Cubada pequeña, La Horadada, Castro Valnera.


Iniciamos la marcha en el puente sobre el río Trueba en la carretera de Lunada, justo donde está el cartel indicador de otra ruta "La senda del Bernacho" (enlace) rayas blancas y amarillas. También comienza en este punto "La vuelta a Salcedillo" (enlace) rayas blancas y azules. Nuestra ruta está claramente balizada y marcada con postes indicadores y rayas rojas y blancas.


Las tres recorren a la par los primeros 800 m (primero NO y luego O). Un poste indicador señala el desvió para "La ruta del Bernacho" a la derecha. Continuamos hacia adelante, pasamos el arroyo de Lunada y llegamos a una nueva bifurcación donde cogemos la derecha abandonando "La Vuelta a Salcedillo" que continua por la izquierda. Avanzamos entre cabañas ganando algo de altitud, luego la pista sigue un itinerario paralelo al río Trueba hasta llegar al puente medieval. Aquí giramos al norte y comenzamos a ganar altura teniendo La Horadada en frente. La pista hace algún quiebro, entra en un hayedo y llega hasta el circo del Curro cuya base está ocupada por un amplio prado con cabaña de uso privado.



 La pista vuelve a dar un quiebro y sigue ascendiendo hacia el SE luego vuelve a girar hacia NO y llega a lo alto del promontorio donde un poste de madera indica que estamos en el Curro. Volvimos por el mismo camino.



EL BOSQUE DE GAMUETA. EN LINZA, ANSÓ.




El bosque de Gamueta es un recorrido que parte del refugio de Linza en Ansó (Huesca), recorre 7,5km y salva un desnivel de 300m. Se trata de un paseo fácil pero muy vistoso, sobre todo en otoño, cuando el bosque se viste de colores antes de que las los arboles se desnuden de hojas. La senda está bien balizada y señalizada con marcas de pintura verdes y amarillas.



Desde el refugio de Linza subimos (S) al paso de caballo entre hayas por una pendiente no muy severa. Descendemos hacia el sur entre prados para entrar en una zona boscosa. Al de un kilometro cambiamos de dirección a Este y seguimos la vaguada de un arroyo que viene de la Plana de Diego.



 Más o menos al de un kilometro y medio atravesamos el arroyo y nos dirigimos hacia el sur, subimos una pequeña pendiente herbosa y entramos de nuevo en el bosque de Gamueta. Iniciamos el descenso por el barranco de Gamueta dando un quiebro hacia el oeste, bajamos hasta el arroyo que atravesamos por puente de madera.


 Sin perder la dirección seguimos la pista que nos conduce hasta la carretera a la altura de la fuente de los clérigos. Por la carretera con dirección norte llegamos de nuevo al refugio de linza. A demás de la belleza del bosque de hayas en otoño pudimos disfrutar de unas magníficas vistas del Txamantxoia.



UBEGI, EL NACIMIENTO DEL BAIAS. EN EL CORAZON DEL GORBEA.





Desde Areatza subimos a Pagomakurre para coger la pista que conduce hasta las campas de Arraba (S). Continuamos hacia el paso de Aldabe (SE) hasta llegar a las campas de Zastegi. Este paso está dominado por la cima de Gatzarrieta. Torcemos con dirección (O), pasamos al lado del Menhir de Zastegi y cogemos una senda que desiende. Pasamos entre cabañas teniendo la mole de Urratza a nuestra derecha. Encontramos un gran tronco de un roble caído, entonces entramos en el cauce del arroyo Padrobaso o Zastegi y remontando unos metros hacia el norte llegamos a la surgencia donde nace , Ubegi. Pedrobaso es el topónimo que recibe el Baias es sus primeros metros. Su nombre deriva probablemente de Ibaia que significa "el río" en euskera, tal y como indicó Koldo Mitxelena.


En total recorrimos 12 km de ida y vuelta y subimos un desnivel acumulado positivo de unos 500m.



BUSCANDO ESPACIOS DE LIBERTAD




En las siguientes líneas Luis Alejos expone su punto de vista sobre la situación y los principales problemas que afectan a la Federación Vasca de Montaña. Su analisis de calidad, conoce la problematica sobre el terreno, y comprometido con una idea del deporte de la montaña democrática y popular es suficiente para que la lectura del artículo sea recomendable. Pero el hecho de haber sido censurado y considerado " inoportuno" por el  actual equipo de redacción de Pyrinaica hace imprescindible conocer cuales son esas ideas que tanto inoportunan. Aunque es un artículo largo léelo entero. Merece la pena saber que es lo que le escuece a la Federación Vasca De Montaña. 

BUSCANDO ESPACIOS DE LIBERTAD

Antes de enviar esta carta a los clubes de montaña intenté publicar en Pyrenaica un artículo de opinión dirigido a los 30.000 federados y federadas de EMF. El equipo de redacción rechazó el artículo por considerar inoportuna su publicación. No voy a enjuiciar tal comportamiento, el respeto que me merece Pyrenaica está por encima de cualquier consideración. También envié el artículo a una de las personas que integran la Junta Directiva de EMF, recibiendo una respuesta similar. La negativa a difundir ese texto choca con lo declarado en la asamblea federativa de junio respecto a la renovación de la página web: “adecuarla a este tiempo, abierta a la participación de la gente.” Si en la web de EMF o de las Federaciones Territoriales hubiese un espacio para expresarse libremente, ese habría sido el destino del artículo. Me dirijo ahora a los clubes como último recurso para intentar acercarme al conjunto de federadas y federados

El título del artículo, “Pasó el temporal, vuelve la calma”, señalaba la opinión positiva que tenía del nuevo equipo de EMF. En vista de lo ocurrido, reivindico con un nuevo título “espacios de libertad”. El contenido del artículo no varía en lo esencial, aunque al no estar limitada la extensión puedo expresarme con mayor detalle. El tono del texto anterior era el del actual, cualquiera puede comprobar si está escrito de forma adecuada. Mi intención es dar un repaso a la problemática de la EMF, utilizando dos referencias: las conclusiones del estudio sobre federaciones deportivas publicado en 2012 por la Dirección de Deportes del anterior Gobierno Vasco y mi experiencia como exmiembro de las asambleas de EMF y BMF.

Informe sobre actividades deportivas

Una de las conclusiones del citado estudio señala: “El actual sistema electoral federativo no es percibido como verdaderamente democrático”. En el caso de EMF los hechos acaecidos durante el periodo anterior (ajenos por tanto a la actual Junta Directiva), prueban la certeza de tal valoración. Esa etapa se caracterizó por una intensa situación conflictiva, derivada de una moción de censura que se pudo evitar, desembocando en una gestión federativa judicializada, con presupuestos opacos, férreo control de las asambleas y cuestionamiento de la autonomía de Pyrenaica.
Dicho estudio precisa además: “La sociedad demanda una mayor orientación hacia el deporte de participación, aunque actualmente las federaciones están ligadas fundamentalmente al deporte de competición”. Los presupuestos de EMF costean sobre todo actividades competitivas, en detrimento de las prácticas colectivas de los clubes. Siendo la EMF el organismo deportivo más numeroso y participativo de la CAPV, no menos del 80% del presupuesto deportivo se dedica a financiar competiciones.
El estudio advierte también: “Las federaciones deberán responder mejor a los intereses diferenciados de las mujeres”. En efecto, no se aplica la representación proporcional, ni se crea una vocalía específica de mujeres, ni se asume las responsabilidades que en materia de igualdad establece el Decreto 16/2006 de Federaciones Deportivas.
Problemática federativo.

Uno de los problemas de EMF es la escasa participación de los clubes. La asamblea de Arrasate (21/04/12) contó con la presencia del 15% de los 200 clubes que la integran, bajando a 26 en la última asamblea de Elgeta (15/06/13). La ausencia de los clubes se intensifica desde que EMF antepone el deporte espectáculo a las actividades montañeras. La evidencia de dicha realidad está en la información publicada en Pyrenaica y a través de la web federativa: la mayoría de las noticias se refieren a competiciones. En mi opinión, para lograr que los clubes vuelvan a las asambleas hay que afrontar tres retos: 1) transparencia en la gestión, 2) cauces efectivos de participación, 3) financiación equitativa de todas las actividades.

Sin transparencia no puede haber confianza. La información debe fluir sin interferencias. Cada miembro de la asamblea tiene derecho a conocer, con el detalle que un equipo auditor, las cuentas que maneja la JD. Por ejemplo, un dato solicitado y nunca atendido: importe real de las competiciones, con todos los conceptos, que incluyen, además de las cantidades presupuestadas, costes de administración, dietas de técnicos, jueces, árbitros, gastos de la JD, contrapartidas de acuerdos comerciales, etc.

La participación requiere cauces específicos. La creación del Comité de Control de la Asamblea es un paso en la buena dirección. Las funciones que se le asignan son correctas, pero si la JD se reserva el papel de convocarlo, presidirlo e interviene en sus deliberaciones, lo convierte en apéndice de la JD. El Comité de Control debe actuar de forma autónoma, dependiendo únicamente de la Asamblea.
Para que la financiación de las actividades deportivas sea equitativa basta aplicar criterios de proporcionalidad en función de las personas que participan en cada modalidad. No es justo que una minoría que persigue la profesionalización acapare las subvenciones. Las competiciones de montaña deben seguir la pauta de las expediciones al Himalaya, recaudando fondos a través de la financiación comercial.

Las carreras de montaña son, se reconozca o no, una especialidad del atletismo. En la asamblea del 9 de noviembre se presenta un nuevo reglamento que amplia las modalidades de carreras a nueve, una más que el anterior. Se podrán organizar carreras ultra trail cuyo recorrido supere “la distancia mínima de 80 km en una única jornada”, cuando en el anterior eran los 42,2 km de un maratón. Los sucesivos equipos directivos de EMF priorizan cada vez más las competiciones sobre el montañismo tradicional.

Los presupuestos para el 2014 no difieren en lo esencial de los correspondientes a años anteriores. Siguen siendo cuentas sin desglosar que no permiten comprobar el coste real de cada actividad deportiva. El deporte espectáculo acapara la mayor parte de las subvenciones. Si al solicitarlas se tuviesen en cuenta las conclusiones del informe jurídico solicitado por 30 clubes de Bizkaia en 2011, el reparto sería distinto.

Superado el periodo de convulsión federativa, se dan condiciones favorables para abordar las tareas pendientes. Desde mi punto de vista, es preciso emprender un proceso de regeneración que requiere cambios organizativos, estatutarios y presupuestarios. Esa transformación no se puede realizar de la noche a la mañana. Para empezar es preciso mostrar voluntad de cambio. Lamentablemente, si los clubes no se implican, si no acuden a las asambleas y plantean iniciativas, todo seguirá como hasta ahora.

Algunas propuestas

Para evitar las experiencias negativas de los últimos años convendría incluir, donde corresponda en cada caso, este tipo de medidas:

1) La moción de censura debe tener el contrapesa de la moción de confianza.
2) Los estatutos deberían recoger la autonomía de Pyrenaica.
3) Crear una vocalía de mujeres encargada de hacer cumplir la normativa de género.
4) Formar una vocalía de clubes que garantice el contacto inmediato y directo
5) Asambleas federativas: a) cualquier federado o federada debería tener opción de acudir sin derecho a voto, b) además de publicar la documentación en la web, mantener el envío en papel, c) no es admisible la delegación de voto en personas ajenas al club representado, d) regular los tiempos de intervención evita aplicaciones abusivas, e) las actas deben recoger todas las opiniones y el resultado nominal de las votaciones, excluyendo expresiones vejatorias referidas a miembros de la asamblea.
6) Realización de auditorías externas al concluir el mandado de cada Junta Directiva.
7) Reconsiderar la permanencia de EMF en la UIAA sin derecho a voto.
8) No vincular el nombre y la imagen de EMF a ninguna marca comercial.
9) Recuperar las marchas reguladas como método idóneo para aprender a caminar por la montaña y dar a conocer el territorio de Euskal Herria.
10) Abrir un espacio de opinión en las web federativas.

A modo de conclusión

Este artículo contiene opiniones personales cuestionables y discutibles. Al difundirlo intento que en los clubes, asambleas, revista Pyrenaica y web federativas se debata la problemática actual de EMF. Lo hago sabiendo que expresarse libremente o ejercer la crítica son tareas ingratas que acarrean incomprensión, descalificaciones y enemistades. Esa es la amarga experiencia que he sacado como exmiembro de las asambleas de BMF y EMF. Para comprobarlo basta releer las cartas publicadas en Pyrenaica o el acta de la asamblea de BMF donde se me acusa de mentir.

La Junta Directiva de EMF puede elegir entre llevar la gestión federativa siguiendo las pautas de los equipos anteriores o renovarla. Corresponde a la asamblea, integrada mayoritariamente por los clubes, supervisar y enjuiciar esa gestión. Lo que ocurre en el campo de la política debería bastar para entender que sin transparencia y controles efectivos todo poder tiende a la arbitrariedad. De la misma manera que sin libertad de expresión no hay democracia.

Luis Alejos

LA RUTA DE LA FRENTE. EN LAS MACHORRAS DE ESPINOSA DE LOS MONTEROS.





Es una ruta circular que comienza en Las Machorras sube el curso del río Trueba, remonta las estribaciones de Las Crespas y vuelve a Las Machorras por el valle de Rio Seco.


El inicio de la ruta coincide con "La senda de Valdescaño y la Vuelta a Salcedillo" (ver enlace) que describí en un post anterior. Partimos de Las Machorras. Detrás de un gran roble situado en centro del barrio cogemos la pista asfaltada que nos lleva a un puente sobre el rio Trueba, donde ya encontramos las rayas blancas y azules que nos guiarán durante todo el recorrido. Con dirección ONO seguimos el curso del rio pasando por el barrio de Berolunchu y por los pozos conocidos como los Pilangreros. A un kilometro del primer puente encontramos un segundo que no pasamos. Seguimos, ahora con dirección NNO, hasta llegar a unas cabañas donde la senda se cementa. Cambiamos a Oeste para llegar a un tercer puente que sí cruzamos y que tiene un poste señalizador indicándonos la dirección de ruta "La Frente". Aquí abandonamos la senda de Valdescaño.


Ahora cambiamos SE entre prados y las cabañas del barrio del Cuadradal hasta llegar a la carretera de Lunada. La ruta comienza la travesía de las estribaciones de Las Crespas para pasar al valle de Rio seco. Al otro lado de la carretera cogemos una pista que sube (Oeste) hasta la cota de 1000 m, luego dibuja un amplio zigzag hacia el sur cerca del monte Lalar, pasa al lado de unas cabañas que crían burros y sube por el hayedo. No perdemos la orientación sur hasta salir del hayedo en la carreta que recorre el valle de Rio Seco. Ya estamos en la otra vertiente de Las Crespas, continuamos un tramo (300 m) por carretera hasta encontrar un poste indicador que nos lleva hacia el SE, unos doscientos metros, entre prados de nuevo. Luego, con orientación general SO, seguimos más o menos en zigzag pasando por varias cabañas hasta volver a salir de nuevo a la carretera durante unos 50 m. La ruta nos vuelve a meter entre prados, esta vez con dirección Este para descender hasta el Rio Seco mientras atravesamos otro magnifico hayedo. Durante todo este tramo Las Crespas y los molinos de viento presiden el recorrido.


Una vez atravesado el río, seguimos paralelos a su margen derecho, hacia el NE, dentro del hayedo, hasta salir a la amplia pista que con la misma dirección nos devolvió a Las Machorras.


DIENTE DE BATANES Y ALTA RUTA POR LAS CUENCAS LACUSTRES DE LOS EMBALSES DE BRAZATO, BRAMATUERO Y BACHIMAÑA.



Alta ruta por las cuencas lacustres de los embalses de Brazato, Bramatuero y Bachimaña coronando el Diente de los Batanes sur oriental. En total un recorrido de 18km y 1500 metros de desnivel.


Salimos de la casa de piedra, en los baños de Panticosa. Todavía entre los edificos del complejo turístico de los baños recorrimos los primeros metros (S) para atravesar el arroyo Caldarés y luego SE unos metros más pegados al arroyo Brazato hasta cruzarlo. Entonces iniciamos la ascensión NE alejándonos, poco a poco, de los baños. En un primer momento el recorrido coincide con la GR11 que rápidamente abandona. Con un corto y rápido zigzag alcanzamos un edificio vinculado a los baños y ya con dirección SE nos adentramos en el barranco de Brazato a través de un bosque de pino. ( Una aclaración: nuestro zigzag no es el de la GR11 que va directamente al ibon inferior de Brazato, sino un recorrido más a la derecha según se asceciende). Según subíamos pudimos fotografiar el amanecer sobre Arlas, Argualas y Garmonegro a
nuestras espaldas (N) y Foratura en frente (S).


Remontamos el barranco de Brazato SE, pegados al curso del arroyo por su margen derecho, hasta que lo atravesamos descalzos porque traía mucha agua, para dirigirnos al circo de Brazato. El bosque fue desapariciendo para dejar lugar a los canchales de granito que nos acompañaron ya durante todo el recorrido. Aunque están bien marcados con hitos es fácil desorientarse. Cuando nos situamos algo por encima de la cota de 2300 m (2,10h) pudimos ver a nuestra izquierda el Ibon bajo de Brazato. Sobre nuestras cabezas SE se levantaban las cimas de Sarrato/Tablato y Brazato, hacia el norte contemplamos por primera vez los tres dientes de Batanes. Aquí mismo cambiamos de dirección (ENE) hasta llegar al embalse de Brazato (2427 m) (2,45h). Recorrimos su margen izquierda (N) y pasamos por el puente metálico encima de su cabecera pudiendo contemplar al fondo Collarada, Peña Escarra y Pala de IP. La mole de Punta del Puerto se reflejaba sobre sus aguas.


Continuamos (NE) hacia el puerto de Brazato o "cuello alto de Brazato" coincidiendo con la GR11 y pasando por encima de los tres ibones altos de Brazato (3,20h). Sin llegar al puerto de Brazato cambiamos a NO para remontar una pedrera que nos dejó en el collado de Los Picos de Labaza (2632 m) (4,05h). Descendimos del collado (N), nos colocamos encima de los ibones de Serrato y Labaza y manteniendo el rumbo avanzamos por canchales hasta el collado Xuans (2763 m) (5,30h). A la izquierda se eleva El Pico Xuans, al norte El pico Serrato y a la derecha la vertiente occidental de Los dientes de Batanes. Son tres : el noroccidental (2877 m), el central (2899 m) y el suroriental (2910 m). Este último es el más alto y nuestro objetivo.


Desde el collado pasamos a la vertiente oriental de Los Dientes de Batanes y con dirección S nos dirigimos al más alejado y más alto de los tres. Llegamos al collado meridional de esta mole donde iniciamos la trepada que nos condujo a la cima (6,30h) (2910m). La trepada tiene un paso PD de IIº y luego otro de Iº+. Desde la cima es impresionante el panorama de la cuenca lacustre que acabábamos de recorrer. También destacan La Gran Facha, Marcadou, Badet, Arlas, Argualas y Garmonegro.


Descendimos haciendo un rapel para evitar destrepar el paso de IIº. Nos dirigimos (N) hacia el embalse de Bramatuero alto (2520 m) (8,30h) con buenas vistas sobre Badet, los picos de Arratille y Vignemale. En la cabecera del embalse cambiamos a (O) para bajar al Embalse bajo de Bramatuero (2320 m) (9,30h) y poco más tarde volvimos a cambiar el rumbo (S) para llegar al Embalse Alto de Bachimaña cerca del refugio viejo de Bachimaña. Hasta aquí realizamos el descenso siguiendo unas marcas blancas y negras que pasan por los tres embalses, pero decidimos recorrer el embalse de Bachimaña por su lado izquierdo en vez de por el derecho donde se encuentra el camino habitual. El lado izquierdo también está señalizado con hitos que conviene seguir para no acabar en el pantano. En varios puntos hay cables que hacen de pasamanos y algún destrepe fácil. Una vez en la cabecera del embalse buscamos cena y cama en el refugio nuevo de Bachimaña (11,30h) (2192m).


Al día siguiente siguiendo la GR11 y el curso del rio Caldarés (S) bajamos a los Baños de Panticosa, nuestro punto de partida.



CUMBRES DEL BARRANCO DE ESCARRA.



Desde Escarrilla (1150 m) seguimos la carretera que remonta el Valle de Tena, cruzando el puente sobre el Río Escarra. En la boca del túnel tomamos la carretera vieja, encontrando en breve las señales de una PR. Las marcas blancas y amarillas van por un camino que se interna en el bosque (ONO), pasa por encima del túnel y gana altura sobre del Río Escarra, mientras asciende en zigzag bajo los desplomes de Las Grampas. Al salir del tramo escarpado y a veces expuesto, se cruza un bosquecillo y se llega a un cruce (1600 m) (1.00 h) con carteles de la PR – HU  91.


Cuando aparece el Embalse de Escarra el camino avanza horizontal. Antes de llegar encontramos la bifurcación del Collado de Pazino (1600 m). Abandonando ambas rutas, superamos (oeste) una loma, alcanzando una cota herbosa (1829 m) (1.45 h) situada encima del Embalse de Escarra. En el cercano Collado de Tosquera (1816 m) enlazamos con el cordal que viene de la Punta del Pazino (1965 m). Vamos a emprender un recorrido de crestas yendo siempre en dirección oeste. En primer lugar remontamos una pala herbosa que nos sitúa en las Puntas de la Tosquera (1946 m)  (2.15 h).


Desde la siguiente depresión (1894 m) atravesamos otra cota herbosa (1927 m) antes de afrontar el pronunciado ascenso más pronunciado que permite alcanzar la Punta Condiana (2239 m) (3.00 h). La cresta opuesta es abrupta, la evitaremos bajando un poco por la cresta sur, luego en diagonal (NO), hasta lograr enlazar con la siguiente brecha (2214 m). Por una pendiente de piedra suelta se llega enseguida a la Punta Sorpena (2249 m). Continuando por el lomo del cordal, desde otra depresión (2209 m) se vuelve a ganar altura para concluir el recorrido de crestas en el Pico de Tres Hombres (2276 m) (3.45 h).
Desde esta cumbre se divisan por el norte Midi d’Ossau, Sierra de Ferraturas, Arriel, Palas, Balaïtous, Picos del Infierno y Picos de las Argualas. Al sur el Río Gállego separa la Sierra de Tendenera de la Sierra de la Partacua, que se prolonga a través del cresterío del Pico de Escarra hasta el Pico de Anayet y el Col del Portalet.


Volviendo sobre nuestros pasos hasta el collado anterior (2209 m), nos deslizamos hacia el sur por el pequeño circo donde surge la Fuente Condiana. Aunque los rastros de sendero recomiendan faldear la Punta Condiana, seguimos (sur) el curso de la torrentera por la margen derecha. Cuando las aguas se desploman hacia el fondo del Barranco de Escarra, nos desviamos más a la derecha, bajando por empinadas palas herbosas hasta la pista de recorre el valle (1700 m). Enfrente tenemos una cabaña de pastores con dos literas y colchones reventados. Siguiendo el trazado de la pista en sentido descendente (este), al llegar al pabellón ganadero situado en la cola del Embalse de Escarra cruzamos el río sobre el puente contiguo (1630 m). Permaneciendo en la pista que gira al sur, ignorando una pasarela que permite vadear el torrente, nos elevamos por el Barranco Gorgol hasta el Embalse de Tramacastilla (1690 m) (5.15 h). Abandonando entonces la pista que se bifurca, bordeamos el ibón represado por la orilla derecha. Al llegar a la presa, como debajo el terreno es pantanoso, damos un corto rodeo antes de afrontar la pendiente herbosa (NE) que conduce a un collado (1806 m) rodeado de varias cotas. Ahora, en vez de seguir en esa dirección (NE) en busca del Collado de Tarmañones, nos desviamos hacia la derecha (SSE). Una senda bien marcada progresa por los pastizales en busca de la cresta que conduce (NE) a la Punta Tarmañones o Pimendalluelo (1966 m) (6.15 h). Esta cota herbosa ofrece magníficas vistas sobre las sierras y cordales que circundan el Valle de Tena, siendo visible hasta el Vignemale.



Descendiendo por la empinada y herbosa pala norte de cara a la Punta de la Cochata (1908 m), una vez en el Collado de Tarmañones (1754 m) tomamos la senda que se desliza (este) por el Barranco de la Tallata, hasta enlazar con una pista que faldea los pliegues de la montaña. Al trasponer la cerca que comunica con otra pista en mejor estado (1440 m), la abandonamos. Bajando (ENE) por el contrafuerte de El Saldo, ya por espacio arbolado, topamos con la pista que entra en el lecho del Río Escarra poco antes de desembocar en la carretera cerca de Escarrilla (1150 m) (8.00 h).

Luis


NARANJO DE BULNES POR LA CARA SUR. VIA DE LOS MARTINEZ



No soy escalador, ni pretendo serlo, pero pisar la cima del Naranjo era un deseo al que nunca renuncié, una perla en mi mochila. La cara sur del Naranjo de Bulnes era asequible para mí  si se cumplían unas condiciones, la más importante, ir acompañado de un buen primero de cordada que garantizara la seguridad.


Rafa y yo estábamos decididos y convencidos de que podíamos subirlo y optamos por contratar un guía de Altius, Sergio, para que nos asegurara la escalada. Rafa tiene más experiencia y habilidad que yo en estas lides. Así que organizamos "el trío calavera", Sergio primero, abriendo la vía, Rafa segundo, asegurando a Sergio y yo tercero, sin más obligación que no caerme y no ponerme muy pesado.


No voy a describir la vía porque es muy conocida. El paso de 5º en adherencia al principio, los tubos de órgano, el anfiteatro etc. Los rápeles los hicimos por la Teogenes, 3 largos y uno corto, con extraplomo en el segundo. Me remito a las descripciones de Luis Alejos en "Alta montaña Iberica" y de David Atela en "Los Urrieles, Macizo Central de Picos de Europa".



Mis sensaciones fueron variadas y contradictorias. Desde cierto miedo en el paso de 5º en adherencia, sin ninguna razón porque estaba muy asegurado, hasta el gusto por la escalada   en los tubos de órgano y el disfrute en los rápeles. Ni que decir tiene que llegar a la cima fue una satisfacción plena. Rafa, por su parte, me comentó que disfrutó como un niño en la pared y frente a las dudas que podía tener en un principio escaló toda la vía con absoluta solvencia y seguridad en si mismo. Sergio, el guia de Altius, además de un profesional que dio seguridad a la cordada en un 100%, es una persona agradable y simpática que se integra en el grupo, con la que se puede pasar un fin de semana de montaña.

Acompañamos este relato con unos esquemas de los pasos y la vía. Como se verá algunos escaladores consideran que hay pasos de V y otros de IV+.








Bueno, resumiendo, para mí, y no exagero, ha sido una experiencia inolvidable.


Si alguien que lea estas líneas está interesado en contactar con Sergio y con Altius adjunto la dirección Web  www.altiusaventura.com .